El mundo en la matrix es el de los inadvertidos, engañados y dormidos. Es el mundo del eterno sueño del cual sólo se despertarían aquellos que crean, tengan fé, usen y agudicen su vista para ver la realidad que se esconde detrás del nombre de las cosas aparentes, se deshagan del velo que les impide ver y “recuerden”. En el Corán se dice con evidencia: “te hemos descorrido el velo por lo que tu vista ahora es más penetrante”(50 :22) en referencia al encuentro con Dios en la otra vida. También dice Dios, refiriéndose a los humanos distraídos o inadvertidos que viven esta vida creyendo que es la verdadera, última y absoluta: “tienen ojos pero no los usaron para ver” (7: 179) En la película al “elegido” le dolía la vista porque según Morfeo no las usó como es debido en la tierra como para ver la esencia de las cosas (Ese Morfeo se atribuye el rol del arcángel Gabriel cuya función divina fue siempre la de adiestrar y enseñar a los mensajeros y elegidos de Dios los asuntos de la fe y la creencia).
Por otro lado esto se corrobora con lo señalado por el profeta del Islam -Mohammad- quien decía “la gente está dormida, cuando muere despierta”. En esta vida, las cosas se esconden detrás de sus nombres, o sea lo que vemos puede no ser La Realidad, puesto que nuestra vista no puede penetrar la realidad objetiva. Aquello que se oculta tras el velo (el nombre de las cosas) es La Realidad auténtica o absoluta. Solamente en la otra vida se puede acceder a las esencias de las cosas que solo son inteligible en la tierra en su aspecto “convencional”. De este modo, a pesar de que la “supuesta realidad” no sea más que un sueño no se trata de una completa ilusión. En el Corán (57: 20 y 45: 35 y otras) dice Dios al respecto: “...y la vida presente no es sino un goce engañador”, “la vida terrestre os engañó”, etc. en referencia a los que se dejan engañar y embaucar por esta realidad terrenal.
En relación a las marcas en la espalda de Neo se me ocurre recurrir también al sagrado Corán donde se pueden leer los siguientes versículos: “y de cuando tu Dios extrajo de las espaldas de los hijos de Adán sus descendencias y les hizo atestiguar: ¿acaso no soy yo vuestro Dios? y asi lo confirmaron, pues lo hacemos para que el día del juicio final no digais que estábais inadvertido”(7 :172). Esta aleya es el eje de la filosofía del Islam, sin la cual no se entendería el motivo del envió de profetas (o “elegidos”) y tampoco la tan reiterada e insistente mención de la palabra “recuerdo” en el Corán (y que Morfeo mencionó en la segunda parte de la película como medio para la salvación). Según el Islam los seres humanos habían hecho un pacto o compromiso con Allah antes de nacer y caer a la tierra. A raíz de ese compromiso quedó “sellado un pacto” (en la película, ese sello lo representan las marcas que llevaban los “creyentes sionistas” en distintas partes de sus cuerpos y especialmente en la espalda de “el elegido” ya que de su espalda su descendencia nacería tal y como ocurrió con Adán según se desprende de la aleya anterior).
El verdadero creyente (y no el aferrado a la vida terrenal de las ilusiones) recibe un shock y se “traslada” con su memoria a ese momento en que atestiguó ante Dios en la otra vida, la vida real.
En el Corán (2: 174 y 39: 61 y otros) se le reserva a aquel que confía en Dios y cree sin dudarlo un instante en la otra vida real el derecho de gozar de la protección de Dios y no le alcanzará ningún mal: “no sufrirán ningún mal por gracia de Dios”. De ahí que cuando Neo logra creer es provisto de una fuerza especial; la fuerza de la fe que lo convierte en inmune a todo. Dios le pide al musulmán que lo recuerde mencionando su nombre para que Dios se acuerde de él y lo proteja. El buen musulmán en las horas difíciles debe mencionar a Dios para que éste lo salve; pues dice Dios en el Corán: “mencióname y yo me acordaré de tí y agradéceme” (2 :151). En la película les basta con pronunciar unas palabras por teléfono para ser “trasladados” al más allá donde nadie los pueda alcanzar ni hacer daño. ¿Qué es lo que Allah quiere que recordemos y para el cual envió a sus profetas “elegidos”??. Pues no es otra cosa sino ése testimonio que rendimos ante él antes de nacer y bajar a la tierra; si logramos “recordar”, nos desharemos del velo que cubre nuestra vista en esta tierra y alcanzaremos la fe ganando la otra vida real. El incrédulo, según el islam, sólo lo lograría en el día del juicio final cuando ya es tarde para creer: “entonces el hombre recordará, ¿pero de qué le servirá recordar?”(98 :26), pues “bajamos una barrera por delante de ellos y por detrás, ofuscamos su vista por lo que no pudieron (captar la realidad) con sus ojos”(36: 8).
En cuanto al "cerrajero y la llave" en la segunda parte de la película tienen que ver con que Dios pone personas y/o cosas en el camino de los creyentes para resolver sus asuntos, pues Dios a veces no interviene ni acude a nuestra ayuda en esta vida en forma directa sino a través de otros humanos y otras causas a las que tenemos que adivinar o buscar. Para alcanzar el objetivo final había que valerse y hacer uso de las causas o los caminos y medios que Dios puede facilitar. Al respecto dice el Corán aludiendo a uno de los elegidos: “le concedimos poder en la tierra y el conocimiento de las causas y medios para alcanzar sus propósitos” (18: 84).
Por otro lado esto se corrobora con lo señalado por el profeta del Islam -Mohammad- quien decía “la gente está dormida, cuando muere despierta”. En esta vida, las cosas se esconden detrás de sus nombres, o sea lo que vemos puede no ser La Realidad, puesto que nuestra vista no puede penetrar la realidad objetiva. Aquello que se oculta tras el velo (el nombre de las cosas) es La Realidad auténtica o absoluta. Solamente en la otra vida se puede acceder a las esencias de las cosas que solo son inteligible en la tierra en su aspecto “convencional”. De este modo, a pesar de que la “supuesta realidad” no sea más que un sueño no se trata de una completa ilusión. En el Corán (57: 20 y 45: 35 y otras) dice Dios al respecto: “...y la vida presente no es sino un goce engañador”, “la vida terrestre os engañó”, etc. en referencia a los que se dejan engañar y embaucar por esta realidad terrenal.
En relación a las marcas en la espalda de Neo se me ocurre recurrir también al sagrado Corán donde se pueden leer los siguientes versículos: “y de cuando tu Dios extrajo de las espaldas de los hijos de Adán sus descendencias y les hizo atestiguar: ¿acaso no soy yo vuestro Dios? y asi lo confirmaron, pues lo hacemos para que el día del juicio final no digais que estábais inadvertido”(7 :172). Esta aleya es el eje de la filosofía del Islam, sin la cual no se entendería el motivo del envió de profetas (o “elegidos”) y tampoco la tan reiterada e insistente mención de la palabra “recuerdo” en el Corán (y que Morfeo mencionó en la segunda parte de la película como medio para la salvación). Según el Islam los seres humanos habían hecho un pacto o compromiso con Allah antes de nacer y caer a la tierra. A raíz de ese compromiso quedó “sellado un pacto” (en la película, ese sello lo representan las marcas que llevaban los “creyentes sionistas” en distintas partes de sus cuerpos y especialmente en la espalda de “el elegido” ya que de su espalda su descendencia nacería tal y como ocurrió con Adán según se desprende de la aleya anterior).
El verdadero creyente (y no el aferrado a la vida terrenal de las ilusiones) recibe un shock y se “traslada” con su memoria a ese momento en que atestiguó ante Dios en la otra vida, la vida real.
En el Corán (2: 174 y 39: 61 y otros) se le reserva a aquel que confía en Dios y cree sin dudarlo un instante en la otra vida real el derecho de gozar de la protección de Dios y no le alcanzará ningún mal: “no sufrirán ningún mal por gracia de Dios”. De ahí que cuando Neo logra creer es provisto de una fuerza especial; la fuerza de la fe que lo convierte en inmune a todo. Dios le pide al musulmán que lo recuerde mencionando su nombre para que Dios se acuerde de él y lo proteja. El buen musulmán en las horas difíciles debe mencionar a Dios para que éste lo salve; pues dice Dios en el Corán: “mencióname y yo me acordaré de tí y agradéceme” (2 :151). En la película les basta con pronunciar unas palabras por teléfono para ser “trasladados” al más allá donde nadie los pueda alcanzar ni hacer daño. ¿Qué es lo que Allah quiere que recordemos y para el cual envió a sus profetas “elegidos”??. Pues no es otra cosa sino ése testimonio que rendimos ante él antes de nacer y bajar a la tierra; si logramos “recordar”, nos desharemos del velo que cubre nuestra vista en esta tierra y alcanzaremos la fe ganando la otra vida real. El incrédulo, según el islam, sólo lo lograría en el día del juicio final cuando ya es tarde para creer: “entonces el hombre recordará, ¿pero de qué le servirá recordar?”(98 :26), pues “bajamos una barrera por delante de ellos y por detrás, ofuscamos su vista por lo que no pudieron (captar la realidad) con sus ojos”(36: 8).
En cuanto al "cerrajero y la llave" en la segunda parte de la película tienen que ver con que Dios pone personas y/o cosas en el camino de los creyentes para resolver sus asuntos, pues Dios a veces no interviene ni acude a nuestra ayuda en esta vida en forma directa sino a través de otros humanos y otras causas a las que tenemos que adivinar o buscar. Para alcanzar el objetivo final había que valerse y hacer uso de las causas o los caminos y medios que Dios puede facilitar. Al respecto dice el Corán aludiendo a uno de los elegidos: “le concedimos poder en la tierra y el conocimiento de las causas y medios para alcanzar sus propósitos” (18: 84).
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